Lean, estudien y cultiven el espíritu crítico

El jueves pasado tuve la oportunidad de asistir a dos eventos. En Barcelona, por la mañana, estuve en el Congreso de la Sociedad Europea de Terapia Génica y Celular. En Madrid, al final del día, en la conferencia inaugural del Master en Evaluación Sanitaria y Acceso al Mercado de la Universidad Carlos III. En Barcelona sólo se hablaba de ciencia, del desarrollo de terapias para tratar enfermedades que no deberían existir. Se nota que en el horizonte siempre esté el cáncer y otras patologías con mayor prevalencia, pero créanme: sólo se habló de ciencia. En Madrid, Isabel Pineros expuso de forma muy clara la visión actual del Ministerio respecto del acceso al mercado de los productos que puedan aparecer a resultas de los esfuerzos de los científicos a los que había escuchado por la mañana en Barcelona. Los gestores de la prestación farmacéutica en los sistemas de salud europeos y los estudiantes del Master tienen por delante retos mayúsculos.

Nada va a parar a los científicos, pero los recursos públicos no son infinitos y gestionar las expectativas de los pacientes no será tarea fácil. Pensando en estas cosas se me ocurrió pedir a Isabel Pineros que diera algún consejo a los jóvenes estudiantes del Máster. La respuesta, buenísima: “lean, estudien mucho y no pierdan el espíritu crítico”. Lo de leer y estudiar mucho es básico, hay que encontrar el tiempo para hacerlo. En España, en los últimos meses, desde el departamento dirigido por Patricia Lacruz han cristalizado iniciativas de altísimo valor e interés plasmadas en documentos accesibles a todos (bien por la transparencia!) que hay que leer y estudiar con detalle. También es esencial que todos los agentes implicados cultiven su espíritu crítico. A la industria se le puede pedir que lo tenga presente cuando valore la potencia de los datos clínicos con los que se presenta ante el gestor para ofrecerle un producto; y en este sentido espero que Valtermed sea una herramienta al servicio de todas las partes implicadas. Nace sobre la base de fundamentos sólidos (la relevancia de los resultados en relación con la financiación), se presenta de forma transparente con documentos potentes, y con una marca atractiva.

A la administración también debemos pedirle que lea, que estudie y que cultive su espíritu crítico. Hay que pedírselo con honestidad y pero también con firmeza, porque todos sabemos que cuando las circunstancias te colocan en una situación donde tienes algo más de poder que tu interlocutor, existe el riesgo de olvidarse del espíritu crítico. En Madrid se habló también del Plan para fomentar el uso de genéricos y biosimilares y se dijo que todas las aportaciones a la consulta abierta hasta el 7 N serían leídas y estudiadas. La semana pasada ya escribí que se trata de una iniciativa muy bien gestionada desde el Ministerio. Analizar las aportaciones con espíritu crítico contribuirá a la mejora del documento.